¿Qué es?
Es una técnica de evaluación del desempeño que permite la recopilación o colección de materiales y producciones elaboradas por las estudiantes donde demuestran sus habilidades y logros alcanzados. Los mismos se ordenan en forma cronológica e incluyen una reflexión sobre su trabajo.
¿Cómo se elabora?
El docente
1.Define el propósito del portafolio.
2.Determina con qué trabajos, producciones y evidencias el estudiante va a demostrar el aprendizaje
3.Determina el instrumento de evaluación y los criterios que se tomarán en cuenta para valorar el portafolio.
4.Determina cómo se hará la autorreflexión y con qué periodicidad.
La estudiante
1.Elabora los trabajos, producciones y evidencias para el portafolio. 2.Autoevalúa y reflexiona respecto a cada trabajo.
3.Archiva en el portafolio los trabajos que el docente solicite junto con sus respectivas reflexiones.
¿Para qué se usa?
1.Observar el progreso de las producciones de las estudiantes durante cierto tiempo.
2.Fomentar la autoevaluación y la auto-reflexión.
3.Promover en las estudiantes la percepción de sus propios progresos y el monitoreo del avance en su aprendizaje.
4.Reflexionar sobre las estrategias pedagógicas que usa el docente. 5.Integrar varias áreas curriculares del currículum.
6.Tener evidencia concreta del proceso de aprendizaje de las estudiantes.
Rúbrica del portafolio
¿Cómo se evalúa?
El docente debe evaluar periódicamente el portafolio de la estudiante. Para esto elige el instrumento de evaluación que utilizarás: lista de cotejo, escala de calificación o rúbrica.
Luego asigna un punteo con base a lo anotado en el instrumento de evaluación. Con esta información el docente debe platicar con la estudiante respecto a aquellos indicadores en los que debe mejorar y decirle qué puede hacer para conseguirlo.
La estudiante también debe realizar una autoevaluación de su proceso de aprendizaje con base en el portafolio que está elaborando.